Camelia, Yo y Mediasnegras. Al lado de mi bota, algo de mi hiedra |
Algún día, con más tiempo, escribiré acerca
de una noche inolvidable en la que me vestí de Poison Ivy en un aniversario de
Círculo BDSM para gozar con los sumisos y
las damas que me acompañaron a juguetear con mis hiedras venenosas
Mistress Roxy.
Venenosa Primavera. Septiembre 2013
Wikipedia: Hiedra
Venenosa es un personaje ficticio y enemiga de Batman. Es una mujer pelirroja
muy atractiva, vestida en un traje verde hecho de hojas y obsesionada con la
botánica. Usa toxinas de plantas para llevar a cabo sus crímenes pero también su seducción para sacar ventajas.
Yo: Cortame 4 tiras de 1 metro aproximadamente de la enredadera del jardín.
Ponelas en una bolsa con un cepillo de pelo, una fusta, una sombra de párpados
verde iridiscente, un lipstick rojo anaranjado y mi perfume de orquídea negra.
Mi esclavo: Sí, Señora,
pero me da un poco de miedo no saber que planes tiene para esta noche.
Yo: Me alegro.
Lo bien que hacés en sentir esa sensación.
Mi esclavo
marido, sin comprender pero tampoco sin cuestionar, cumplió mis indicaciones. Me
esperó con la bolsa en el auto hasta que Yo culminé con mi arreglo y vestimenta. Un tapado largo y
negro no dejaba entrever que es lo que llevaba dentro pero un fuerte maquillaje
en tonos rojizos y verdes metalizados reverberaba en mis ojos, que chispeaban
cual luciérnagas del Bayou. En lugar de botas verdes (mis botas verdes de Sarkany son muy bellas pero el tono de su verde es un tanto apagado) elegí las altas
negras vinílicas brillantes, protagonistas de tantas noches de sexo y disco. Esa
noche, en mis raíces no sólo llevaba mi apetito sexual sino el mito más
ancestral de las tentaciones: La Eva del
Paraiso, la Madre Naturaleza, Démeter y Perséfone. La pureza irracional que
predomina sobre cualquier construcción cultural humana racional. No hay textos,
no hay consensos. Yo sabía que mi destino era el ser temida y adorada o un
absoluto fracaso, sin términos medios.
La noche en cuestión arrancó bastante mal.
El lugar estaba cerrado pese a las reservas hechas con
antelación. Parece que el BDSM y el rock and roll llevan en la sangre el mismo
destino: haber nacido mal paridos, cargar siempre con una maldición a cuestas.
Pero así fue como, mediante contactos de
Bruno DEGE Díaz, nuestro
Batman en Círculo BDSM, terminamos la
noche en la cueva de Sasha y Anubis (Débora
Kruk), caverna cuasi aterradora, universo trash semioculto en el corazón de Palermo, mezcla de garito y
burdel clandestino que resultó ser la puesta en escena perfecta para todo
aquello que llevaba preparado.
Dice niní
- sobrelafalda sobre aquella noche:
No se pudo donde estaba acordado y acabamos donde no esperábamos: en un lugar indeterminado de Buenos Aires.
Con sólo entrar.... el misterio, las escalinatas, penumbras, grafittis. Una onda
Bronx, como sacado de El Gabinete del Dr Caligari. Tenemos que filmar una
película sado ahí mismo! Hasta había una ventana que asomaba a un abismo!
Varios de los momentos más
alegres y memorables de los eventos de mis ultimos años tienen un elemento en
común: por ahí siempre andaba
Camelia, esta vez en corsette, pollerita de bailarina y escote y mangas de
red. Una verdadera Betty Boop pelirroja, con toda la seducción y picardía en un hermoso pack explosivo. Basta imaginarla así para
alegrarte el día más nefasto Y qué decir de Milady
MediasNegras, más bonita que
nunca, con cadenas, brillanteces y calzas con tajito.
Camelia se engalanó delante mio con sus pezoneras, movedizas al ritmo de su
sonrisa, envuelta en redes negras, un maillot fencenet from toes to neck, corsette y pollerita tutú y altísimos
zapatitos Lady Jane. De MediasNegras, diosa fetish de Buenos Aires, sólo digo
que en su traje de policewoman,
me daban ganas de delinquir sólo para que ella me lleve presa. Verla en acción te hace comprender porqué tantos hombres y mujeres fantasean
con la sumisión ante las mujeres sensuales; no hay forma de estar ante Ella sin
sentir un deseo irrefrenable por adorarla.
En la DC Comics
de EEUU están tristes porque la mejor Poison Ivy vive en Buenos Aires y se
llama Mistress Roxy ((y
llora, y llora, y llora Batman llora) Icono plurisexual! Pasión de multitudes!
El mundo bajo tus botas! Para tener sexo desenfrenado en el vivero!
Gracias
niní, muñecota sissy. Así de desenfrenada, envuelta en mis ramas de hiedras, no
me resultó difícil acercarme y enredarme con las otras Damas Negras de la
noche. Nos reíamos, jugábamos y nos besábamos, un culto improvisado en el altar
de la diosa Safo de Lesbos. Cascadas de boas verdes alredededor de mi piel,
cabellera suelta de sacerdotisa oficiando el rito pagano. Lo gocé tan sádica
como el veneno de las ponzoñosas noches, tan sensual como la hoja de la planta
del bien y del mal, tan femenina como la Naturaleza. Pero mis recuerdos de
aquella noche no van sólo hacia ellas. Apoltronada en un trono montado de apuro con elementos
diversos y dudosos, mi amigo Omegaz
se encargó de entretenerme y divertirme junto a
otros sumisos, entre ellos, un muchacho venido
de las Islas Canarias que me acompañó hasta un baño graffiteado a recibir mi
lluvia dorada. Se portó tan pero tan bien que se lo recomendé a MediasNegras
quien lo sometió a una deliciosa sesión de
ponyplaying. Y por supuesto niní -sobrelafalda, tan coqueta y rea como
siempre, con su inimitable imitación de la Tita
Merello que mereció risas, aplausos y el premio mayor: que yo lo someta a
una sesión de sexo oral con humillación verbal que me dejó más que complacida.
Pasaron dos años de aquella noche. Algunos testimonios están guardados en un hilo de Círculo BDSM. Otros están en mi memoria y en la de mi sumiso marido. Aquella noche, yo fui el caldo de cultivo del femme - veneno, mi hiedra había crecido en la imaginación de aquellos participantes que saben tomarse en serio el juego de la seducción sado. Pues a la hora de ser envenenado o envenenada sexualmente, es la Mujer Hiedra quien te arrastra poderosa y sin límites. No hay fallos en el trabajo de la Natura, no hay piedad, no hay justicia. Sólo libertad, devenir y pureza.
Una vez
plenamente satisfecha y con los fuegos del sexo y el sado ya reducidos a brasas,
saludé a los anfitriones, a mis amados sumisos y a mis preciosas amigas y le
ordené a mi esclavo que vaya por el auto. Una vez camino a casa el me dijo Ahora comprendo y sé mucho más del fulgor y
la esencia de mi matrimonio. Yo, con la mirada sonriente y sádica de Poison Ivy cuando desconecta con un golpe de su verde
bota el respirador que mantenía viva a la esposa del Capitán Frío, le respondí
con su misma frase. Querido, después de
todo, quien quiere a una esposa frígida?
Muy bueno como siempre!
ResponderEliminarSaludo atentamente con el gran afecto y mismo respeto de siempre
Commendatore
Muy lindo tu relato...me gusta como llevaste el mundo del Comics a la reunion. Que afortunados quienes participaron de este interesante encuentro.
ResponderEliminarCarlosM
Muy afortunados! Algunos todavia lo recuerdan
EliminarRecuerdo que expresé como a mi Ama preferida del cine a Poison Ivy hace unos posts atrás cuando se presentaron las diez mas importantes aquí en este blog. Que la Señora Roxanna Madonna la haya elegido en esta ocasión para su disfraz habla de las similitudes entre ambas. Con razón adoro tanto a esta Mujer que se convierte en deidad ante nuestros propios ojos...!
ResponderEliminarCarlin soldado, sos un dulce, te quiero
EliminarNADIE QUIERE UNA ESPOSA FRÍGIDA, NI EL MÁS COBARDE DE LOS HOMBRES.
ResponderEliminarLos más cobardes, en todo caso, las desearan castigadoras, hundidoras, aniquiladoras. Una mujer castigadora no es frígida, quizás se ahogue en un sinfín de masturbaciones. Si fuera el caso, esa mujer más que frígida sería desgraciada.
Pero no hay peor desgracia que la frigidez, que es como ver el mundo pasar y saber que no puedes subirte...
Me gustaría verte patalear y dejar sin pulmón artificial a un cobarde. Aniquilación total a quien no supo, como mínimo, ser un buen servidor...
Senyora... als teu peus (despullats, això sí)
Miquel
Miquel, que bueno volver a leer tu ardiente prosa
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