Sharon Mitchell y Barbara Dare
Estamos en la víspera del Día de la Mujer, que se celebra en mi blog de una manera muy poco convencional. Una de las consignas básicas de este blog es que la femineidad es una fiesta, entonces nada mejor que festejarlo entre mujeres. Un nuevo top ten de exquisitos videos lésbicos.
La primera selección mujer - mujer llegó para celebrar San Valentín 2017, la podés ver en este link y las estrellas invitadas fueron Marlene Dietrich, Greta Garbo, Romy Schneider, Brigitte Bardot, Jane Birkin, Capucine, Raquel Welch, Farrah Fawcett, Emmanuelle Seigner, Rossana Arquette, Charlize Theron, Cameron Díaz y Penélope Cruz. La temática era, dicho por mis propias palabras ... la mirada insinuante, la mano con uñas largas y cuidadas avanzando por debajo del soutien, el baile de a dos lleno de contoneos, el beso fugaz que apenas roza los labios, la caricia sugerente que te hace dudar si te quiero como amiga o busco algo más....
La primera selección mujer - mujer llegó para celebrar San Valentín 2017, la podés ver en este link y las estrellas invitadas fueron Marlene Dietrich, Greta Garbo, Romy Schneider, Brigitte Bardot, Jane Birkin, Capucine, Raquel Welch, Farrah Fawcett, Emmanuelle Seigner, Rossana Arquette, Charlize Theron, Cameron Díaz y Penélope Cruz. La temática era, dicho por mis propias palabras ... la mirada insinuante, la mano con uñas largas y cuidadas avanzando por debajo del soutien, el baile de a dos lleno de contoneos, el beso fugaz que apenas roza los labios, la caricia sugerente que te hace dudar si te quiero como amiga o busco algo más....
Máxima Femineidad II
Puesto 10. Delphine Seyrig. Les levres rouges (1971).
Un clásico del vampirismo gótico de los años setenta. La condesa Bathory, una vampiresa bisexual de rojos labios inspirada en la legendaria condesa sanguinaria, llega a un hotel y se enreda en un triángulo amoroso con una joven pareja hasta llegar a un trágico desenlace. Delphine Seyrig fue una de las más grandes actrices francesas de los años sesenta y setenta, siempre con personajes femeninos fuertes y jugados.
Puesto 9. Erica Boyer. Cagney and Stacey (1984).
La detective privada que viene a interrogar a la denunciante de un robo de joyas y que termina enredándose con ella entre las sábanas. Erica Boyer en traje de cuero y Patti Petite, semidesnuda en lencería, nos regalan un momento delicioso de seducción entre dos diosas ochentosas.
La detective privada que viene a interrogar a la denunciante de un robo de joyas y que termina enredándose con ella entre las sábanas. Erica Boyer en traje de cuero y Patti Petite, semidesnuda en lencería, nos regalan un momento delicioso de seducción entre dos diosas ochentosas.
Puesto 8. Silvia Saint. Searching for Silvia (2003).
El momento de las rubias sexies. Tomar champagne en la pileta mientras besas a tu novia entre sorbo y sorbo es un lujo que sólo algunas mujeres muy sibaritas del sexo pueden darse. Mujeres como Silvia Saint. Nacida en Checa como Silvie Tomcalova, la Saint ingresó en el porno en 1996 y fue la gran estrella europea de la compañía Private. Después del 2000 y pese a su gran curriculum como partenaire sexual de hombres negros bien dotados, Silvia se dedicó exclusivamente al porno lésbico hasta su retiro años después
Puesto 7. Ornella Muti - Senta Berger. Ritratto di borghesia in nero (1978).
Ambientada en Venecia durante los años treinta, esta es una sórdida historia plagada de traiciones y venganzas dentro de una rica familia italiana en decadencia. Senta Berger es la bella madura y Ornella Muti la joven inexperta.
Ambientada en Venecia durante los años treinta, esta es una sórdida historia plagada de traiciones y venganzas dentro de una rica familia italiana en decadencia. Senta Berger es la bella madura y Ornella Muti la joven inexperta.
Puesto 6. Salma Hayek. Frida (2002).
En mi top ten anterior de escenas lésbicas, Charlize Theron y Penélope Cruz protagonizaban una escena que es un clásico de la seducción lésbica; un baile de tango entre dos damas que se acarician y besan mientras bailan bajo la admirada mirada de los hombres que las rodean. Ahora es Salma Hayek la que seduce y termina besando apasionadamente a Ashley Judd. Puesto 5. Elizabeth Berkley - Gina Gershon. Showgirls (1995).
Un compilado de los momentos más hot en la historia de seducción y odio entre las dos famosas strippers de Showgirls, Elizabeth y Gina, que termina, cómo no, con un beso de amor entre las dos. En el medio, la escena más amada por los fetichistas de las uñas largas.
Brigitte Nielsen es una perversa carcelera en un país centroeuropeo que lleva a sus reclusas a un casino para ofrecerlas como prostitutas. Viciosa y sádica, no puede evitar la tentación de encerrarse a gozar de la belleza de Kimberly Kates, pero el juego de pronto cambia de roles y la carcelera, extasiada por su víctima, se convierte en su sumisa.
Puesto 3. Sharon Mitchell - Barbara Dare. Wet Pink (1985).
Un nuevo lápiz labial color rosado con efectos húmedos sale a la venta pero provoca en sus usuarias un efecto secundario inesperado; un irresistible deseo de besarse entre ellas. El juego del lipstick, el movimiento de la mano al pintarse los labios, la forma fálica del rouge...un gesto universal de seducción para seducirnos entre nosotras y terminar fundidas en fogosos besos de amor. En este caso, lo protagonizan dos maestras del sexo de los años dorados del porno, Sharon Mitchell, con el pelo algo más largo que de costumbre y Barbara Dare, la reina de los gang bangs que tampoco decía que no cuando se trataba de gozar con una bella compañera de rodaje
Puesto 2. Katsuni. Pretty Pussy (2004).
En un ambiente lujosamente afrancesado, Katsuni y dos de sus amigas se seducen con miradas y juegos de besos. Me gustan estas escenas en donde el sexo lésbico está asociado a la máxima elegancia.
Puesto 1. Coralie - Lea Martini. Paris chic (1997).
Una obra de arte del refinamiento erótico que ganó varios premios, dirigida por Andrew Blake. En esta dos escenas filmadas en la explanada del Louvre y en la fuente de la Place dela Concorde, Coralie es la dominatriz que le obsequia a Lea Martini un delicado collar de esclava y luego la pasea entre besos y caricias en su auto por París.